Soloséquenosénadar

Pues sí sé nadar pero como si no supiera. Me da miedo. Ya sé! es absurdo, pero no puedo respirar con los ojos cerrados y agua sobre mi rostro! No-pue-do!

Después de mil intentos por vencer ese maldito miedo al agua (bueno, no es miedo al agua, en realidad es miedo a ahogarme), decidí que no tiene ningún caso torturarme. No pasa nada sino nado, puedo estar perfectamente en la playa tomando el sol y yéndome a refrescar a la orilla del mar. NO PA SA NA DA!!!

El problema es que no se hundirme sin taparme la nariz, no puedo abrir los ojos si tengo agua en la cara y no puedo respirar con los ojos cerrados. Esta cabrón no? jajajaja

Ya le he preguntado mil veces a mi mamá si tuve algún acontecimiento trascendente o no, cuando estaba chirris que me pudiera haber dejado un trauma con el agua y nada, dice que no. Entonces no lo entiendo.

Créanme que es huge!!! o sea, te puedo mandar a ingesulandia si me avientas a una alberca, lo juro! Por eso me he perdido de buenas fiestas donde hay que nadar. Aquí en Lausanne es muy común que en verano la gente se va a albercas públicas y cada que me invitan encuentro algún pretexto para no ir o cuando de plane ya no puedo safarme pues digo que tengo MUCHAS ganas de tomar el sol.

Las únicas dos veces que me he metido a nadar al mar fue en el 2002 en la playa del Princess en Acapulco, cuando así como si nada me dieron una noticia bien fuerte, estaba muy borracha pero me cayó como cubetada de hielos sobre la cabeza... me metí a nadar y nadar y nadar y nadar. No sé como me atreví, honestly, creo que fue automatismo, ni lo disfrute.

La segunda que es muy reciente. Fue más por reto que por nada. Estaba en Sietges (o como se escriba), tenia muchísimas ganas de meterme al mar, se veía delicioso, y de verdad tenía muchas ganas, cañón, cañón, pero me estaba enojando porque me da miedo. Ernesto me insistió y no sé porqué pero le tengo muchisisisisisisísima confianza y me siento mucho muy bien con él y lo quiero mucho. Así es que me metí al mar. Por supuesto no lo solté un segundo jajajajaja. Estoy segura que mis uñas le dejaron marcada la espalda jajaja

Bueno, el caso es que me acaban de invitar a la playa y no voy, en realidad no es por miedo, es por otra razón que cero que ver, pero me acordé de Ernesto y quise decirle GRACIAS porque la ultima vez que fui a Barcelona lo disfrute al mil. Me encanto haber podido meterme al mar.

Tienen algún miedo así de cañón?